Esta ruta de senderismo, no muy extensa ni de gran exigencia física, recorre algunos de los elementos más destacados del paisaje, cultura y naturaleza del interior de Fuerteventura. Podrá acceder a ella de dos formas:
- Bien desde la carretera de Betancuria-Pájara desviándose hacia el poblado de Vega de Río Palmas, donde encontrará aparcamiento y la ruta señalizada como “Vega de Río Palmas-Ajuy”.
- O bien desde la carretera de Pájara-Ajuy, desviándose hacia el poblado y camino de Buen Paso, donde en su final encontrará otro aparcamiento al lado del Palmeral de Las Peñitas.
Esta ruta enlaza el poblado de Vega de Río Palmas con Buen Paso, y a lo largo de su recorrido podrá disfrutar de un entorno que combina belleza natural, historia y biodiversidad, siendo conocida por sus paisajes espectaculares, rutas de senderismo y lugares de interés histórico. Partiendo desde el Palmeral de las Peñitas podrá ir encontrando:
- Palmeral de Las Peñitas: este palmeral, ya en un estado algo decaído por la larguísima sequía que arrastra Fuerteventura y el impacto de las cabras asilvestradas, es, paradójicamente, uno de los palmerales más singulares e importantes de toda Canarias. En este palmeral se encuentra el origen en sí mismo de la Palmera Canaria (Phoenix Canariensis) como especie, evolucionando desde palmeras datileras que llegaron desde África sometidas a las duras condiciones de la isla. Se dice de las palmeras que aquí se encuentran que son las más puras de todo el archipiélago, de ahí su enorme valor. Este palmeral ha visto varios proyectos para intentar restaurarlo, así que se ruega cruzar la zona con el máximo cuidado y respeto por el entorno. Las palmeras aquí brindan un contraste vibrante con el terreno rocoso circundante y desempeñan un papel importante en la preservación de la biodiversidad local, al ser refugio para diversas especies de aves y otros animales, creando un ecosistema único en la isla.
- Arco de las Peñitas: (nota: este tramo del sendero es secundario y de gran exigencia física y dificultad, no estando señalizado. No intente acceder sin la forma física o el equipo correcto) Según subamos por el sendero del Barranco de Las Peñitas, podremos desviarnos a la izquierda, escalando durante unos 20 min por la ladera hasta dar con este arco de piedra. Esta zona se encuentra formada por inmensas moles de piedras plutónicas formadas lentamente en el corazón del antiguo volcán de la zona, principalmente sienitas y dioritas, que quedaron al descubierto al desplomarse el volcán sobre el Atlántico. El paso de los milenios y el poder erosivo del viento y el agua ha creado uno de los elementos más singulares de la zona, el Arco de las Peñitas, una formación rocosa natural que se ha convertido en un atractivo para senderistas y escaladores. Los senderos que conducen a este arco ofrecen vistas espectaculares del valle y las montañas circundantes, además de ser rutas populares para los amantes del senderismo.
- Ermita del Malpaso: siguiendo el sendero señalizado nos adentraremos en el Barranco de las Peñitas, un despeñadero impresionante de rocas inmensas pulidas por la erosión. En él, encaramada en un lateral, se encuentra la Ermita de Malpaso, un pequeño santuario encalado en blanco con gran significado histórico y cultural. En la cueva donde se halla ahora la ermita se dice que se encontró a la Virgen de la Peña, desaparecida de su santuario después del ataque pirata de Xabán Arraez que arrasó Betancuria. En ella se veló a la Virgen muchas décadas hasta que se la trasladó a su actual santuario en Vega de Río Palmas, quedando la ermita como lugar de peregrinación. Aunque pequeña, la Ermita de Malpaso es un lugar de reflexión y devoción, frecuentado por peregrinos y visitantes que buscan un momento de tranquilidad en el hermoso entorno natural.
- Presa de Las Peñitas: esta presa, que encontrarás como un imponente muro de mampostería en medio del despeñadero, es un oasis en medio de un terreno árido y rocoso. Esta presa inició su construcción en la década de 1930 para ayudar con el abastecimiento de agua en la isla, aunque la Guerra Civil y otros retrasos impidió que se culminase, quedándose en unos 20m. Debido al pobre estado del suelo en la cuenca del Río Palmas, altamente desertizado y desprovisto de vegetación, las lluvias torrenciales arrastran grandes cantidades de sedimentos, y la presa quedó colmatada en pocas décadas. A día de hoy la Presa de Las Peñitas se encuentra completamente llena de tierra, y lo que antes era un embalse ahora se ha convertido en una lámina de agua estacional que da cobijo a una gran biodiversidad autóctona, en flora como tarajales o palmeras canarias, pero también en fauna como anfibios, reptiles (como la endémica Lisneja) o aves como la tarabilla canaria, la focha común o el tarro canelo.
La combinación de naturaleza, historia y cultura en la Presa de Las Peñitas la convierte en un lugar único para visitar. Ya sea para explorar el palmeral, caminar por los senderos, admirar el Arco de Las Peñitas o descubrir la Ermita de Malpaso, hay algo para todos. Este entorno es un recordatorio de la rica historia y la diversidad ecológica y geológica que se pueden encontrar en Fuerteventura.
